En agosto de 2013, el Gobierno de Tanzania aprobó un importante cambio en la forma de adquirir anticonceptivos en un esfuerzo por garantizar un flujo constante de suministros que lleguen a quienes los necesitan. El cambio fue impulsado por una recomendación del Comité Nacional de Seguridad Anticonceptiva -un grupo técnico de colaboración dirigido por el Ministerio de Salud y Bienestar Social- para cambiar a un sistema de contrato marco para agilizar los pedidos y mejorar la disponibilidad de ciertos anticonceptivos. Este estudio de caso describe cómo la iniciativa Planificación Familiar Anticipada, junto con funcionarios del gobierno y proveedores de servicios de planificación familiar, trabajaron a través del comité de anticonceptivos para realizar el cambio, que entró en vigor en septiembre de 2013.