Los programas de planificación familiar, que han perdido importancia durante varios años debido a muchos factores, necesitan un impulso especial. En los últimos años ha habido cierto impulso positivo, en parte debido al impresionante éxito en países como Ruanda, Malawi y Etiopía, por lo que es un momento oportuno para aprovechar esta energía.¬†También hay una creciente necesidad de fortalecer la capacidad y el compromiso de los gobiernos nacionales para garantizar programas y avances sostenibles.
Con este fin, la Fundación Bill y Melinda Gates (BMGF) y la Fundación David y Lucile Packard han financiado conjuntamente un proyecto de tres años, Advance Family Planning (AFP). La evaluación de 2011 considera que, dados los resultados positivos obtenidos hasta ahora, sería prudente ampliar el proyecto para comprender mejor su potencial e institucionalizar mejor su enfoque., Br