Pocos temas son más delicados y polémicos que el aborto, especialmente en Estados Unidos, donde el debate enfrenta el derecho de la mujer a controlar su cuerpo con el derecho del feto a vivir. La batalla estadounidense contra el aborto se exporta cada vez más al mundo en desarrollo a través de la ayuda exterior. Estados Unidos es el principal donante en materia de salud, con más de 2.000 millones de dólares al año, por lo que su influencia es enorme. La mayoría de los países en desarrollo y de las organizaciones no gubernamentales reciben fondos estadounidenses. Dado que las posturas "a favor del aborto" y "a favor de la vida" parecen irreconciliables, parece seguro que esta contienda de altos vuelos continuará.